lunes, 27 de diciembre de 2021

Lecturas: "Conocerme me hizo libre" Julio Boffano.

 

"Conocerme me hizo libre": una novedad de reciente aparición en el mercado editorial uruguayo. Que aborda el recorrido de su autor en el seno de la Iglesia Católica. La fe religiosa, la homosexualidad,  las vivencias de su autor  y las contradicciones entre el discurso dominante y las practicas en el interior de esa institución.

Descripción de la editorial Planeta:

Es una obra testimonial dura y franca de Julio Boffano, ex sacerdote católico que permite conocer su peripecia como homosexual dentro de la Iglesia Católica, desde Montevideo hasta el núcleo más alto del poder en Roma. Un relato que desnuda con detalles muy íntimos y precisos la práctica del doble discurso en la Iglesia, que persiste hasta hoy, visto en la presencia oculta de la homosexualidad en el sacerdocio y la hipocresía de una imposición de celibato, que en la práctica convive, detrás de bambalinas, con una realidad lujuriosa e insospechada para los creyentes de todo el mundo. El libro también expone los flancos de una institución que niega, oculta o hace pasar como excepciones los abusos sexuales a niños, niñas y adolescentes.

Portada del libro.



El protagonista muestra desde su vocación militante por las personas con los derechos vulnerados, las excepciones loables de la iglesia (y las iglesias) que terminan siendo funcionales al sistema, porque el silencio vale para todo, puertas adentro.




Julio Boffano

Licenciado en Ciencias de la Comunicación Social (especializado en comunicación organizacional).

Postgrado en Educación. Periodista especializado en temas de migración, investigador, consultor y asesor en comunicación en varias organizaciones. También es profesor universitario.

En Italia como en Uruguay ha ocupado diferentes cargos vinculados a la comunicación y a la gestión humana. Hasta febrero de 2020, fue el responsable de Comunicación institucional de la Secretaría de Derechos Humanos de Presidencia. Como migrante, ha estado vinculado a trabajar y desarrollar temas migratorios y de Derechos Humanos: fue fundador del Consejo Consultivo de uruguayos/as en Roma del Departamento 20 (2007-2010), es desde 2018 Docente del módulo “Comunicación y Derechos Humanos” en el curso “Enfoque de Derechos Humanos en las Políticas Públicas” organizado por la Secretaría de Derechos Humanos y la Oficina Nacional de Servicio Civil (ENAP). Fue conductor del programa radial “Vaivén” de Radio Sarandí (programa sobre Migración. 2012-2015) y fundador y portavoz del grupo de Retornados a Uruguay (2011), que como objetivo fundamental tiene el de ser un interlocutor válido ante el Estado para instrumentar políticas en conjunto.

Militante de PAR Frente Amplio, sector liderado por Cristina Lustemberg. Nació en Paysandú, vivió 13 años en Roma y para su retorno al país en 2012, optaron por vivir en la Ciudad Vieja de Montevideo.

Datos del autor tomados de:   https://municipiob.montevideo.gub.uy/julio-boffano

lunes, 20 de diciembre de 2021

Lecturas: “La Biblia, el Cristianismo, y la Homosexualidad” Justin R. Cannon.

 

“La Biblia, el Cristianismo, y la Homosexualidad”, es un breve ensayo escrito por Justin R. Cannon, quien realiza en él un análisis de los pasajes que se refieren a la homoafectividad.

El ensayo está estructurado en secciones, cada una de ellas dedicada al análisis de un pasaje de La Biblia. El libro comienza con una descripción de terminología usada en los textos bíblicos y su comparación con los términos usados actualmente.

El propósito de Cannon, es demostrar por medio de una lectura atenta de La Biblia, de que el rechazo a la homosexualidad no se desprende de los propios textos religiosos, sino más bien de una interpretación interesada que se ha hecho de los mismos.

Este trabajo reviste un interés especial para todas aquellas personas de fe, interesadas en acercarse a una interpretación diferente a la que es mayormente conocida, sobre determinados pasajes de La Biblia.

Portada del texto.


Descripción del libro, en su edición en español:

“Hay muchos libros encomiables acerca de la Biblia y la homosexualidad cuyo contenido alcanza desde cien hasta varios cientos de páginas en extensión. Para los interesados estos libros son a veces inaccesibles, o tratan el tema de manera demasiado extensa y profunda. La Biblia, el Cristianismo, y la Homosexualidad, es un análisis conciso, pero profundo, de los versículos bíblicos que con frecuencia son utilizados de forma errónea y abusiva para condenar a los gays cristianos. Este estudio ha sido escrito para que sea accesible a todos, de manera que los familiares y amigos de los cristianos gays y lesbianas puedan tomarse el tiempo de leerlo de forma efectiva. Los Angeles Times describe esta obra como: "un análisis...revelador que sostiene que la Biblia no condena las relaciones homosexuales fieles".


Justin R. Cannon(1984)

Nacido el 9 de julio de 1984 en Detroit, Michigan, es el fundador de www.TruthSetsFree.net , un ministerio de divulgación de los cristianos homosexuales y lesbianas centrado en su folleto "La Biblia, el cristianismo y la homosexualidad". "Los Angeles Times describió el folleto como "una composición iluminante ... análisis que sostiene la Biblia no condena las relaciones homosexuales fieles" (Michael McGough, 18 de julio de 2005). El reverendo Justin también es el fundador de Rainbow Christians ( www.RainbowChristians.com ), el primer sitio web de homosexuales cristianos en Internet, un negocio que vendió a nuevos propietarios en 2009.

Desde 2007, su sitio web de su ministerio bajo el nombre "Inclusive Orthodoxy". Según su sitio web, "la Ortodoxia Inclusiva es la creencia de que la Iglesia puede y debe incluir a las personas lgbt sin sacrificar el Evangelio y las enseñanzas apostólicas de la fe cristiana". Su ministerio afirma la inspiración divina de la Biblia, lo sagrado de la Tradición, y afirma "... que hay un lugar dentro de la vida plena y el ministerio de la Iglesia Cristiana para los cristianos lesbianos, gays, bisexuales y transgénero, tanto los que están llamados a un celibato de por vida y a aquellos que están asociados ".

Rev. Cannon fue presentado como un "Futuro Gay Héroe" en la revista gay The Advocate (5 de julio de 2005) poco antes de graduarse en Earlham College. Posteriormente apareció en The Michelangelo Signorile Show en SIRIUS Satellite Radio. Su trabajo ha sido citado en The New York Times e incluso ha sido reconocido internacionalmente en la revista francesa glbtq Préf ("Ainsi Soient-Ils", número de enero / febrero # 12). El afiliado de Sacramento de ABC News, News 10, presentó un reportaje sobre el reverendo Cannon y su sitio web Rainbow Christians el 29 de marzo de 2007. En 2006, el reverendoCannon fue reconocido como uno de los 100 mejores gays influyentes de la revista Out de la revista . año.

Recibió su Master of Divinity de Church Divinity School of the Pacific en 2009 y fue ordenado sacerdote por el Reverendo Marc Handley Andrus, Obispo de la Diócesis Episcopal de California, el 3 de diciembre de 2011. En 2010, fundó un ministerio llamado Holy Hikes ( www.holyhikes.org ), un ministerio ecológico que presta servicios en el Área de la Bahía de San Francisco, y actualmente se desempeña como Rector de All Saints Episcopal Church en San Leandro, California

Fuente de la información sobre el autor: http://solidopuente.blogspot.com/.../08/justin-r-cannon.html

 

viernes, 17 de diciembre de 2021

Comentario de cine: "Make the yuletide gay” (2009).

 

"Make the yuletide gay” es una película del año 2009. La palabra yuletide viene de las fiestas de Yule, que constituían una celebración que se hacía en los pueblos nórdicos de Europa y que luego se asimiló a la navidad.

Afiche del filme.


El film cuenta la historia de un joven llamado Olaf "Gunn" Gunnunderson, un estudiante universitario gay, que está dentro del clóset para su familia, con la cual va a pasar la Navidad. Sin embargo, algo inesperado sucede. Y es que Nathan, el novio de Olaf, se presenta en su casa para pasar juntos la navidad.



El problema está servido, ya que los padres de Olaf no saben que su hijo es homosexual. Por eso, el joven protagonista tendrá que arreglárselas para que no sospechen que Nathan es su pareja. ¿Será capaz Gunn de ocultar la realidad de su homosexualidad o tendrá que reconocer la verdad a sus padres? Es una comedia ingeniosa sobre las falsas apariencias, recurso que se puso de moda con la jaula de las locas y su versión estadounidense.



Comentario de cine cortesía de Matías Silva.

jueves, 16 de diciembre de 2021

“El poder multiplicador de odio que tienen las redes da escalofríos”(Entrevista a Ernesto Meccia)(*)

 

Entrevista realizada por Estefanía Santoro para “Revista Crítica".

A finales de los 70, cuando el niño Ernesto salía a andar en bicicleta por las calles de un pueblo al oeste de la provincia de Buenos Aires, los chicos le tiraban piedras en las ruedas. También pasaba que en el colegio religioso primario al que asistía, lxs maestrxs citaban a sus xadres porque no quería jugar al fútbol. Ya desde entonces, la lectura lo apasionaba más que el deporte.



El hoy sociólogo Ernesto Meccia dice: “Era tan invivible para mí ese pueblo que le pedí a mis padres que me envíen pupilo con los curas a Luján. Estar pupilo era sinónimo de aislamiento de la barbarie. Por ese tiempo también fantaseaba con otro aislamiento: hacer carrera religiosa y misionar en lugares desconocidos rotativos. La idea era sustraerme a toda mirada conocida. El infierno eran lxs otrxs. En el colegio encontré un mundo silencioso pero hospitalario. Primero porque los curas me transmitieron la disciplina por la lectura, que nunca la abandoné. Segundo, porque no me obligaban a jugar al fútbol. Eso para mí es imborrable. Cuando llegaba la hora del fútbol y yo les pedía permiso para ir a leer”.

Generoso, amoroso, dedicado y respetuoso con sus alumnxs, además de armoniosamente pedagógico, coinciden en definirlo quienes transitan las aulas de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA y la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Universidad Nacional del Litoral. Meccia o “Mecha”, como algunxs lo apodaron después de leer su libro "Los últimos homosexuales" (segunda edición co-editada por Ediciones UNL y Eudeba), tiene muy presente al Ernesto niño discriminado y al joven que salió del clóset después de cruzar unos besos con un conocido abogado en un baño perdido de la City porteña a mediados de los 80.

Del otro lado de la línea, Ernesto responde a cada pregunta con una cadencia paciente, la misma que emplea en sus clases de la carrera de Ciencias de la Comunicación. La calidez con la que trata a sus alumnxs es la misma que utiliza para su escritura, sin rodeos, con un vocabulario sencillo y directo, ése con el que demuestra su lucidez para analizar los cambios sociales y que lo convierten en un sociólogo apto para todo público.

En el colegio religioso de la infancia (una construcción de estilo gótico), Ernesto recuerda que no se hablaba de homosexualidad, pero los curas pregonaban la no discriminación. Esa iniciativa le facilitó el tránsito por la institución: “Me sentí protegido, los curas le paraban el carro a cualquiera que cargara a alguien, sin importar el  motivo. Si alguien ofendía a otro porque era gordo o tenía granitos o era afeminado, los hermanos no la dejaban pasar. Señalaban públicamente esa lesión a la convivencia”. Eran igualitaristas. Hoy piensa que fueron esos curas quienes le dieron la primera demostración de que cualquier clase de discriminación era inadmisible.

A sus 18 años, egresado del pupilo, se mudó a Buenos Aires para estudiar Letras. En esa época había iniciado un noviazgo con una joven. Una tarde, camino al Museo del Cine por la zona de Once, le llamó la atención un hombre que dirigía su mirada hacia él desde un puesto de diarios y revistas. “Fue una epifanía”, dice. “Recuerdo que apareció un señor trajeado que no me bajaba la mirada, ahí tuve por primera vez un sacudón profundo en mi sensorialidad, una cuestión en el cuerpo muy impresionante”.

La historia siguió: “Me acuerdo, muy de la época, que se metió en el baño de un bar, yo lo seguí, nos dimos muestras de atracción hasta que rompió el silencio y me invitó a su casa. Fue una cosa de mucha confusión. Al toque, y no me explico cómo, terminé estudiando Sociología. Letras me seguía gustando pero necesitaba tener conciencia sobre lo que estaba viviendo”. En su casa estaba la Guía del Estudiante que publicada Eudeba (“un libro gordo, del año '82, de color naranja, que tenía los planes de estudios de todas las carreras”).

Ernesto habló “con la muchacha” con la que estaba saliendo para decirle, sin muchas explicaciones, que no podían seguir con la relación. “Fue el nivel máximo de sinceridad que pude tener. Sentí que la liberaba y me liberaba. Conozco muchas historias de otros pibes más grandes que yo que se casaron y llevaban una doble vida, como se decía habitualmente”.



 

P–¿Esos son los últimos homosexuales de los que hablás en tu libro?

 

R–Sí. Los últimos homosexuales son aquellas personas que transitaron dos épocas: vivieron la época dura de la homosexualidad tanto como la época caracterizada por los cambios que todos conocemos. Imagínate, gente que cuando era joven no tenía, ni pensaba siquiera, en las Marchas del Orgullo y menos en el matrimonio igualitario. Me gusta decir que ellos son una generación bisagra. El cambio social de la homosexualidad es algo que estamos viendo y viviendo. El cambio está entre nosotres. Muchas veces mis colegas me dicen “pero falta mucho”, algo que admito pero que también completo diciendo “pero también cambió mucho”, y les pregunto si conocen alguna clase de opresión sobre la que todavía no falte mucho por hacer. Siempre falta mucho porque las opresiones son obstinadas, pero ver lo mucho que se hizo es rendir un tributo al poder transformador de la militancia. Tengo la propensión a ver agua en el vaso y tengo razones muy sustantivas para hacerlo.


P–¿Por ejemplo?


R–La principal es que interactúo permanentemente con gente joven en la Universidad, elles son el presagio de un futuro promisorio en las cuestiones que atañen al género y la sexualidad. Siempre debemos ser críticos respecto de la realidad, porque la realidad puede mejorar, las vidas pueden ser más vivibles, el mundo puede ser más habitable, más hospitalario. Pero si pensamos en lo que era la homosexualidad en aquella época, obviamente que el cambio social está y es sorprendente. Hablo de los últimos homosexuales porque cuando estos cambios comenzaron los protagonistas del libro ya tenían 40, 50, 60 años, es decir, se habían socializado en un entorno que empezaba a resquebrajarse. Uno puede pensar ahora que las cosas están mejor, y que estas personas enseguida van a empezar a valorar el nuevo mundo gay, pero lo que descubrí fue que ellos sentían que, de alguna manera, habían perdido el mundo en el que se habían socializado.




P–¿Cómo era ese mundo?


R–Estaba circundado por la homofobia, el patriarcado y los milicos, pero aún en ese contexto se habían fabricado un mundo propio a fuerza de pequeños gestos de desobediencia, o de resistencias de bajo perfil, como me gusta decir. Los bares, las discos o los baños adonde habían ido, o esos otros lugares de la ciudad donde se daban cita sigilosamente, cada vez empezaban a estar con menos gente. La pregunta que me hago en el libro es cómo pueden habitar el mundo nuevo quienes estaban acostumbrados a vivir en el mundo viejo.

 

P–Justamente hablando de ese proceso de cambio y de mayor aceptación, ¿hay una regresión con el avance de las derechas con ideas homofóbicas, en Latinoamérica con los Bolsonaros y también en Europa?

 

R–El tema de la derechización en Occidente es complicado y me preocupa, porque veo discursos de odio. No solo contra las diversidades sexuales y genéricas, sino también hacia los inmigrantes o hacia la gente que tiene planes sociales, entre tantos otros. Acá en Argentina la derechización tuvo un momento soñado con la llegada del Gobierno de Macri, cuando realmente se le soltó la lengua a un montón de gente con discursos que chorrean odio. Las nuevas derechas son enemigas de lo que entienden como políticamente correcto y exhortan a ser incorrectos y rebeldes. El problema es que bajo lo políticamente correcto están un montón de cosas que atañen a nuestras vidas, en especial, los derechos humanos, las garantías, el derecho a la educación sexual, el derecho a la interrupción legal del embarazo, a la igualdad de género, etcétera. Esto es muy preocupante porque no tenemos que olvidar el contexto tecnológico en el que la nuevas derechas operan: pensar en el poder multiplicador de odio que tienen las redes da escalofríos. Esto que me preguntás me interpela mucho, porque yo suelo oponerme a colegas que hablan de la normalización, la asimilación, el aburguesamiento de gays y lesbianas, como si la sociedad ya los hubiera incorporado. Yo no creo del todo en esas hipótesis.


P–En España tuvo mucho impacto hace unos meses el crimen de odio de Samuel Luis Muñiz.


R–Creo que un crimen como el de Samuel, lo que está sucediendo acá con la desaparición de Tehuel o el crimen de Daniel Zamudio en Chile hace un tiempo, demuestran justamente que no estamos asimilados. Demuestra que avanzamos mucho, pero que para ciertos sectores sociales inflados de odio por ciertas coyunturas políticas, volvimos a ser el mal abstracto, eso que no se sabe mucho qué es pero es el mal y lleva a situaciones de este tipo. No solamente con nuestra gente, por decirlo de alguna manera. Yo seguí de cerca el tema de los discursos de odio contra la migración latinoamericana reciente en Argentina, y supe de gente que estaba haciendo colas en los hospitales y si eras sospechado de boliviano o paraguayo y estabas en el sistema de salud público argentino, se generaban discusiones, inclusive agresiones físicas. Si prendemos la televisión vamos a ver que está lleno de discursos de odio, tanto por parte de comunicadores, periodistas o personajes mediáticos. Es un momento complejo porque, te repito, hoy el odio es multiplicable de una forma sin precedentes debido a todo lo que permite la cultura digital.


P–Pareciera que todavía falta mucho para lograr una verdadera aceptación de las identidades no heteronormadas.


R–La aceptación es un concepto que no me parece interesante porque se relaciona con la tolerancia y la tolerancia tiene que ver con las relaciones de poder. Alguien marcó la cancha antes que vos y que yo nazcamos y dijo “yo soy el tolerante y vos el tolerado”, y obviamente se tolera algo con lo que no se está de acuerdo. Buscar la aceptación me parece una claudicación. El juego sería así: como acepto que no me aceptan me voy a poner las pilas para que me acepten. ¿Perverso, no? No me gusta ese lenguaje porque quedamos entrampados en un juego asimétrico que no creamos y que lo único que puede producir es una aceptación fantasma.

 

P–Estoy de acuerdo, el término “aceptación” refuerza la idea de que eso está fuera de la norma. ¿Qué otro término podríamos usar?


R–Reconocimiento, sin duda. Yo no quiero que me acepten, sí que me reconozcan. Eso quiere decir que me vean tal como soy. Y eso tiene que ser un derecho, no un favor que me haga una persona tolerante. Trayendo un poco a Hannah Arendt te diría que el reconocimiento es el derecho que tenemos que tener de sentarnos a la mesa. La mesa es un artefacto particular porque al mismo tiempo que nos une nos separa: estamos todxs y todxs nos podemos mirar tal como somos desde el lugar que ocupamos. Somos diferentes: cada lugar de la mesa permite esa expresión. Y somos iguales: todes somos comensales. Por eso me gusta pensar en la lucha por el reconocimiento más que en la lucha por la aceptación. Gestionemos nuestros lugares en la mesa y pongámonos a hablar de lo que sea. La mesa con asientos vacíos es un signo de privilegios. Cuando pienso en las militancias LGTBIQ siempre recuerdo esta metáfora. Y desde las luchas por el reconocimiento podemos llegar a pensar que la política de los derechos humanos es incompleta por definición. Nunca va a existir un reconocimiento total; siempre habrá una nueva silla que agregar a esa mesa imaginaria. Es una lucha que no termina.




P–¿Cómo era ser gay en dictadura? ¿Cuáles eran los circuitos clandestinos de resistencia que mencionás?


R–Cuando yo pienso en la vida de los gays en la dictadura, siento que soy una especie de pájaro que ve desde arriba el mapa de la ciudad vigilada por los milicos. Por supuesto que bajo la dictadura, la vigilancia y la represión fueron tremendas, pero es impresionante ver cómo aun en esos contextos de vigilancia y represión, los gays podían de alguna manera zafar. Vos decís circuitos de resistencia, y está muy bien: en esos circuitos de resistencia los gays inventaban desobediencias de bajo perfil. Cuando voy aterrizando veo una clase de socialización, que llegué a verla cuando me mudé a Buenos Aires en el año '85, que se daba en los baños públicos de las grandes estaciones terminales de ferrocarril. Parece imposible que, ante tanta vigilancia y represión, la gente pudiera relacionarse a plena luz del día a través de códigos que les permitía levantar y tener el encuentro volcánico con otro cuerpo. Un mundo invisible para quien no era gay, a plena luz del día. Alucinante. También me llegaron para el libro testimonios de los baños públicos de las grandes reparticiones del Estado, de los ministerios públicos, los tribunales, algunas facultades. Después están las leyendas sobre las fiestas en el Tigre, que han retratado tan bien Alejandro Modarelli y Flavio Rapisardi en “Fiestas, baños y exilios: los gays porteños en la última dictadura”. Y después, mucha gente me ha contado de las fiestas que se daban en algunos departamentos en la ciudad de Buenos Aires. Todo con mucho sigilo y discreción. Tenías que ir caminando cuidándote de no pisar una mina, porque realmente la ciudad era una amenaza latente para quienes hoy conocemos como disidentes sexuales.


P–¿Me podés contar alguna historia que te haya impactado de tu investigación?


R–Me acuerdo la historia de Luis, que es una historia prototípica. Luis en los últimos años de la dictadura fue a una tetera que funcionaba en la estación de Once. Parecía que iba a empezar a tener una historia con un tipo. Y el tipo al final era un policía que no solo se habrá calentado con él, sino que después le sacó la poca plata que tenía y, no conforme con eso, lo llevó hasta la comisaría. Llamaron a la familia. Luis rogó que hablen con la hermana para que no se enteren sus padres, que ya eran mayores. Para Luis fue muy humillante. La relación con la hermana, que era abogada, no volvió a ser la misma. También recuerdo la historia de Alberto, que nació en el '43. Creció con la idea de que su tío había muerto de tuberculosis. Más adelante se enteró de que era gay y que se suicidó arrojándose desde una terraza. La historia de Carlos, que vivía con un hermano que también era gay y nunca se dijeron nada hasta que un día tuvo un problema de chantaje y recién se animó a contarle.




P–¿Y algún recuerdo personal?


R–En el año '86, en un boliche gay que se llamaba Contramano, había conocido a un maestro de escuela que se llamaba Lucho, me llevaba unos cuantos años. Tenía una onda increíble para aquel tiempo: tenía una pelada brillante, llevaba aros en las dos orejas y pulseritas trenzadas de varios colores; lo imaginaba laburando con el guardapolvo blanco. Tuvimos un buen enganche y a la semana siguiente fuimos a ver un show con transformistas en un pub gay que se llamaba Manhattan. Nos besamos en el lugar, vino el mozo y nos pidió que ahí adentro no lo hagamos. En el momento no lo podía creer: no poder besar a un gay en un pub gay. Pero cuando uno se ponía a conversar con la gente se iba enterando de cómo venía la mano. Recuerdo que alguien me dijo que en el baño podíamos besarnos, que el problema excedía al dueño del lugar. Teníamos tres años de democracia vigente y, sin embargo, la Policía tenía entre ceja y ceja a los establecimientos de ocio y diversión de los gays y operaba con total impunidad. Tenía un tarifado escalonado para la coima: cuanto más pagaba el dueño del lugar, más permiso se tenía ahí adentro de hacer lo que uno quisiera. Lo mismo pasaba con los espectáculos: si se pagaba la coima básica cantaba algún transformista, si se pagaba la cifra más alta actuaban los strippers. A juzgar por la práctica prohibida del beso, era evidente que esa noche el dueño no había puesto la cantidad de dinero suficiente.

*Publicado en “Revista Crítica”.

Fuente: https://revistacitrica.com/odio-redes-discursos-homofobicos-gays-disidencias.html.

viernes, 10 de diciembre de 2021

Comentario de cine: "El matrimonio Loving" (2016).

 

“El Matrimonio Loving” es una película histórica estadounidense, que recrea la historia de Richard y Mildred Loving para lograr el reconocimiento legal de su unión matrimonial en el estado de Virginia.

Los hechos que el filme retrata transcurren desde fines de los años cincuenta y durante los años sesenta, plena época de la lucha por los derechos civiles de la población afro estadounidense.

Afiche del filme.


En aquellos años existía una pesada legislación racista heredada del siglo XIX, que establecía una rígida segregación racial en muchos estados del Sur de los EEUU. Dichas leyes afectaban el pleno ejercicio de los DDHH de la población negra de los EEUU.

La historia del matrimonio loving y su lucha para lograr que su matrimonio fuera legalmente reconocido en Virginia, marca un hito fundamental en la lucha por los DDHH en EEUU. Ya que provoca la abolición de la segregación racial en el matrimonio en todo el país.

Foto real del matrimonio  Loving


La película fue dirigida Jeff Nichols y cuenta con las actuaciones de Joel Edgerton, Ruth Negga, Michael Shannon, Marton Csokas, Nick Kroll, entre otros. Fue estrenada en el año 2016, recibiendo una buena recepción en el público y la crítica.

Ruth Negga interpreta a Mildred Loving.


“El matrimonio Loving” es un drama muy humano, una película que nos recuerda el valor de luchar por lo que es justo y por defender la dignidad humana.

Joel Edgerton como Richard Loving.


Entre las nominaciones y reconocimientos se destacan:

2016: Premios Oscar: Nominada a mejor actriz (Ruth Negga)

2016: Globos de Oro: Nominada a mejor actor-drama (Edgerton) y actriz (Negga)

2016: Festival de Cannes: Sección oficial largometrajes a concurso

2016: Premios Independent Spirit: Nominada a mejor director y actriz (Ruth Negga)

2016: Premios Gotham: Nominada a mejor actor (Edgerton) y actriz (Ruth Negga)

2016: Critics Choice Awards: Nominada a mejor película, actor, actriz y guión original.

El director y los actores principales( Festival de Cannes).


Históricas LTB: Eleanor Roosevelt-Por Charo Alises(*)

 

Escritora, feminista, activista y política bisexual, la llamaron La Primera Dama del Mundo por sus avances en derechos humanos. Anna Eleanor Roosevelt nació el 11 de octubre de 1884, en la ciudad de Nueva York. Sobrina del presidente Theodore Roosevelt, Eleanor era una niña tímida que sufrió la pérdida de su madre con nueve años y la de su padre con diez. En su adolescencia, la enviaron a un internado para que superara su introversión.

Eleanor Roosevelt y La Declaración Universal de los DDHH.


Se casó en 1905 con su primo lejano, Franklin D. Roosevelt, que se convertiría en presidente de los Estados Unidos. Tuvieron seis hijos: Anna, James, Franklin (que murió cuando era bebé), Elliott, Franklin Jr. y John.  Eleanor trabajó activamente en el servicio público durante la Primera Guerra Mundial, colaborando con la Cruz Roja Americana.

El matrimonio se complicó desde el principio por las intromisiones de su suegra Sara y las infidelidades del marido, en especial por la relación que éste mantuvo con Lucy Mercer en 1918.

Tras el ataque de polio sufrido por su esposo en 1921, Eleanor ayudó a Franklin con su carrera política. Cuando Roosevelt se convirtió en presidente en 1933, Eleanor cambió radicalmente el papel de la primera dama. Demostró  que era una parte importante de la política estadounidense. Habló de los derechos humanos, dio conferencias, defendió las causas de los niños y denunció los problemas de las mujeres, actuando en nombre de la Liga de Mujeres Votantes. Tenía su propia columna en un periódico, llamada Mi día. Eleanor también dedicó sus energías a ayudar a las personas sin recursos del país, se rebeló frente a la discriminación racial y, durante la Segunda Guerra Mundial, viajó al extranjero para visitar a las tropas estadounidenses.

Aunque muy respetada en los últimos años de su vida, su papel como primera dama fue controvertido debido a su franqueza, particularmente respecto a los derechos civiles de los afroestadounidenses.



Tras la muerte de su esposo, el 12 de abril de 1945, Eleanor declaró: La historia ha terminado, en referencia a su intención de abandonar el servicio público. Sin embargo, su futuro resultó ser  muy distinto. De 1945 a 1953, fue delegada en la Asamblea General de las Naciones Unidas. También se convirtió en presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU. Como miembro de esta Comisión, ayudó a redactar la Declaración Universal de los Derechos Humanos, un esfuerzo que ella consideraba su mayor logro.

Además de su trabajo político, Eleanor escribió varios libros sobre su vida y experiencias, incluyendo This Is My Story (1937), This I Remember (1949), On My Own (1958) y Autobiography (1961).

Regresó a las funciones públicas el mismo año que se publicó su autobiografía (1961), cuando el presidente John F. Kennedy la nombró delegada en las Naciones Unidas.

Durante su matrimonio, conocida fue la relación de Eleanor con la aviadora Amelia Earhart. Pero su vínculo más duradero fue con la periodista Lorena Hickok, quien la cubrió durante los últimos meses de la campaña presidencial de 1928 y se enamoró perdidamente de ella. Durante esta época, Eleanor escribió cartas diarias de diez a quince páginas a Hick que pretendía escribir una biografía sobre la primera dama. Las cartas contenían frases como: Quiero abrazarte y besarte en la comisura de tu boca , No puedo besarte, así que beso tu foto y te doy ¡buenas noches y buenos días! En la toma de posesión de Franklin en 1933, Eleanor llevaba un anillo de zafiro que la periodista le había regalado.

Parece ser, que también mantuvo  relaciones  con el administrador del New Deal Harry Hopkins, con quien trabajó en estrecha colaboración y con el sargento de la policía del estado de Nueva York Earl Miller, designado por el presidente para ser su guardaespaldas.

Murió de anemia aplásica, tuberculosis e insuficiencia cardíaca, el 7 de noviembre de 1962, a la edad de 78 años. Fue enterrada en la finca de la familia en el Hyde Park. A pesar de las críticas que recibió, existe un consenso en reconocer que fue una gran activista por los derechos humanos que dedicó gran parte de su vida a luchar por el cambio social y político.

Publicado el 09/06/2020. En “blogs.20minutos.es”.

Fuente: https://blogs.20minutos.es/1-de-cada-10/2020/06/09/eleanor-roosevelt/



*Charo Alises: Abogada, Doctora en Ciencias de la Comunicación, Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Colegio de Abogados de Málaga. Doctora en Ciencias de la Comunicación, Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Colegio de Abogados de Málaga, responsable del “Servicio de Atención Jurídica Gratuita a Víctimas de Delitos de Odio” del Colegio de Abogados de Málaga. Responsable de la asociación LGTB Ojalá de Málaga, miembro del Equipo Coordinador de la FELGTB y miembro del Grupo de Juristas de la FELGTB.

domingo, 5 de diciembre de 2021

Lecturas: "Los Últimos Homosexuales" Ernesto Meccia.

 

"Los últimos homosexuales", escrito por Ernesto Meccia, es un trabajo de gran relevancia para la construcción de una sociología de la homosexualidad en el Río de La Plata.

El libro es, en parte, una continuación de  "La Cuestión Gay", trabajo que fue pionero en el estudio de la homosexualidad desde la sociología.

Portada de la primera edición.


"Los últimos homosexuales" se centra en reconstruir los cambios ocurridos en la cultura homosexual en Buenos Aires, entre fines de los años 80 y la actualidad.

Meccia construye el mundo social de esa generación a quienes denomina como los últimos homosexuales, es decir, aquellos homosexuales mayores que se formaron en el mundo de la cultura homosexual previa a la aceptación social.

De esta forma, Meccia, establece una división entre la cultura homosexual y la de la gaycidad.

Nueva edición.


El libro está escrito con sumo rigor académico y metodológico y al mismo tiempo con un lenguaje llano y ameno que invita a su lectura.

La primera edición del libro es del año 2016 y estuvo a cargo de la editorial Gran Aldea, la segunda edición fue publicada en 2021.


*Ernesto Meccia (General Las Heras, provincia de Buenos Aires, 1968) es Doctor en Ciencias Sociales y Licenciado en Sociología por la Universidad Nacional de Buenos Aires. Es profesor estable de grado y de posgrado en la UBA y la Universidad Nacional del Litoral, donde enseña metodologías cualitativas de investigación. Es autor de “La cuestión gay. Un enfoque sociológico”(2006), “Los últimos homosexuales. Sociología de la homosexualidad y la gaycidad”(2011) y “El tiempo no para. Los últimos homosexuales cuentan la historia"(2016).

viernes, 3 de diciembre de 2021

Comentario de cine: "120 pulsaciones por minuto" (2017).

 

“120 battements par minute”(120 pulsaciones por minuto).

Es una película francesa de temática LGBT, que aborda la epidemia de VIH-Sida en Francia a inicios de los años 90, desde la mirada de un grupo de activistas que luchan contra la epidemia, así como contra los prejuicios y la indiferencia de la sociedad.

Afiche del filme.


Fue dirigida por Robin Campillo, en base a un guión coescrito con Philippe Mangeot La película cuenta con un elenco formado por Nahuel Pérez Biscayart, Adèle Haenel, Yves Heck, Arnaud Valois, Félix Maritaud, Emmanuel Ménard, Antoine Reinartz y François Rabette. Destacandose particularmente, la interpretación de Nahuel Pérez Bscayart.

Robin Campillo, director del filme.


Sinopsis: "París, principios de los años 90. Un grupo de jóvenes activistas intenta generar conciencia sobre el SIDA. Un nuevo miembro del grupo, Nathan, se quedará sorprendido ante la radicalidad y energía de Sean, que gasta su último aliento en la lucha". (FILMAFFINITY)



El filme ha cosechado una muy buena crítica, desde su estreno en 2017. Algunas de las opiniones sobre el filme son las siguientes:

"El sobresaliente drama de Robin Campillo sobre activismo y el sida une lo personal, lo político y lo erótico de manera conmovedora."

Guy Lodge: Variety

"Un nuevo clásico vital del cine gay (...) Humaniza una tragedia histórica con elegancia y agudeza (...) Apena, triunfa y encanta con mucha gracia y comprensión, su latido golpea con genuina e innegable relevancia."

Richard Lawson: Vanity Fair.



“120 pulsaciones por minuto” fue galardonada con varios premios y nominaciones, entre ellas se destacan: Festival de Cannes: Gran Premio del Jurado(2017), Premios del Cine Europeo: Mejor montaje. 3 nominaciones; Círculo de Críticos de Nueva York: Mejor película extranjera(2017); Asociación de Críticos de Los Ángeles: Mejor película extranjera(2017); Asociación de Críticos de Chicago: Nominada a mejor película extranjera(2017); Círculo de Críticos de San Francisco: Mejor película extranjera(2017); así como la nominación como mejor película extranjera para los Oscars del 2018.

El actor Nahuel Pérez Biscayart recibe un premio César.


jueves, 2 de diciembre de 2021

Combatiendo un estigma social: Entre lo verdadero y lo falso del VIH- Por Sheina Leoni (*)

 


Un  momento difícil…

 

Hacía un largo rato que Mauricio se encontraba sentado en una confitería cercana a su barrio tratando de beber el  café ya casi frío que tenía sobre la mesa. Su rostro reflejaba una preocupación fácil de detectar; había recibido el resultado de la prueba de VIH hacía  unas horas y el médico le había confirmado lo que ya sospechaba: era portador del virus. Miró otra vez el reloj del lugar; Pablo, su mejor amigo, había quedado en venir a conversar con él a las diecisiete horas, y ya se había atrasado una hora. Raro, el joven era muy puntual. Mientras seguía  aguardando, vino a su mente la última conversación telefónica con el muchacho, en la cual angustiado, le había confiado  el amargo secreto guardado hasta el momento.

“No sabías que eras gay”-había tartamudeado Pablo.

“No lo soy”, te lo hubiese dicho si así fuese-respondió rápidamente el aludido.

El diálogo había concluido, con la promesa de continuar charlando personalmente.

Mauricio pensó que Pablo se había arrepentido, y abonando la cuenta, caminó pesadamente hasta la puerta de su hogar, para hablar con su madre, deteniéndose en el primer escalón dela casa tratando de obtener el valor que le faltaba. En ese instante, una voz conocida gritó su nombre: -Mauricio-Se me hizo tarde y olvidé el celular, pero acá estoy, como siempre-dice su amigo Pablo agitado por la carrera.

Los dos hombres se abrazaron con fuerza, continuando juntos el trayecto hasta la puerta de la vivienda .Un último apretón de manos por parte de Pablo, y Mauricio abrió  ésta  abre con resolución. Su madre lo esperaba preocupada en el sillón del comedor, pero el joven ya no tenía miedo, la soledad y el miedo lo habían dejado tranquilo.

 

Tenga empatía, póngase en el lugar del otro.

 

Este artículo no pretende ser una clase de biología que trate sobre las características del VIH, o  del sida, de las cuales conozco muy poco, ni tampoco pasar a formar  parte de la Inquisición, tratando de determinar quiénes culpable o no del surgimiento de una epidemia que está entre nosotros, y por el momento, ha decidido quedarse.

La idea es simplemente plantear el daño que podemos causar a las personas que padecen VIH por los terribles prejuicios y la discriminación de que muchas veces son objeto, a la vez que poner un grano de arena, en la concientización de la responsabilidad que debemos adquirir para prevenir y controlar  el avance  de esta afección. Eso es lo que intentaremos realizar con este humilde aporte. 



 

Aunque usted no lo crea…

 

¿Qué pensaría si le digo el VIH   no se contagia? Pues que estoy diciendo disparates. Efectivamente, este virus no se CONTAGIA se TRANSMITE; parece tenue la diferencia, pero no lo es. Cuando una persona se contagia de una enfermedad, lo hace sin poder evitarlo. Por citar un ejemplo muy sencillo, mencionaremos la gripe.  Subimos a un ómnibus, entramos a una clase, o, y puede ser que si alguna de las personas tiene gripe ésta ingrese  a nuestro organismo muchas veces, sin poder evitarlo.

La gripe, es contagiosa. El VIH, a diferencia del ejemplo antes citado, no puede viajar por el aire e ingresar a un organismo humano, debe ser arrastrado hacia el interior del mismo, a través de un intercambio de fluidos entre dos personas. Es necesario conocer cuáles de éstos pueden transmitir este virus y cuáles no. Por ejemplo: la saliva, sudor, orina o lágrimas no transmiten la infección pero sí lo hacen en cambio: los fluidos sexuales, la sangre y la leche materna .Recordemos que la exposición del feto o el bebé al virus, antes del nacimiento, durante el parto o a través del amamantamiento de una madre VIH positivo, pone en peligro al futuro niño.

Es correcto mencionar también que ser  portador del virus o ser seropositivo significa que se puede transmitir la enfermedad, pero que todavía no se ha desarrollado en la persona  (puede tardar varios años y hasta entonces no presentar ningún síntoma de la misma). Ser enfermo de SIDA significa que ya se  ha desarrollado la enfermedad. Reiteramos, en ambos casos, podemos transmitir la enfermedad si no se toman las precauciones debidas.

Pensar que este virus es contagioso, puede aumentar las actitudes discriminativas, incluso dudar en querer compartir un espacio con una persona portadora del virus, por temor a un contagio que en realidad es imposible.   Lamentablemente, se sigue hablando de contagio, lo que genera en las personas, información confusa, terminología errónea y fantasías atemorizantes. 

Por el contrario ,comprender esta idea ,nos permite  discernir fácilmente que, por compartir un ámbito de trabajo con una persona que es portadora ,no nos hace correr ningún riesgo, ya que no existe intercambios de fluidos transmisores, tampoco por tomar mate café o té, y , mucho menos estar en la misma clase escolar.

 

Una vez más, recordemos:

LA SALIVA NO ES TRANSMISORA DE VIH. 

LA ORINA NO ES TRANSMISORA DE VIH. 

LAS LÁGRIMAS Y EL SUDOR NO SON TRANSMISORES DE VIH. 

Y FUNDAMENTAL: NO PUEDO CONTAGIARME de algo que no es CONTAGIOSO. 



 

¿Quiénes pueden enfermarse de sida? 

 

Todas las personas que no siguen las indicaciones necesarias por los especialistas en el tema así de simple. Este virus no es exclusivo de personas con una determinada orientación sexual (homosexuales, trans ), si bien esta falsa implicación se originó en el hecho de que los primeros casos documentados en Estados Unidos, afectaron a hombres que mantenían relaciones  sexuales con individuos de su mismo sexo. Pero no hay que descartar la investigación que realizó el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA) revelando en el informe “The Gap Report” (El Informe de la Brecha) que los hombres homosexuales y las mujeres transgénero son mucho más afectados por la epidemia del VIH/SIDA, que el resto de personas adultas en el mundo.

Según el informe del departamento de las Naciones Unidas, “los hombres gay y otros hombres que tienen sexo con hombres son 19 veces más propensos a vivir con VIH que la población general”. Además, “las mujeres transgénero son 49 veces más propensas a vivir con VIH que otros adultos en edad reproductiva”.

The Gap Report advirtió también que la incidencia, es decir nuevos casos de infección de VIH, “entre hombres gay y otros hombres que tienen sexo con hombres está creciendo en varias partes del mundo”. 

Cabe aclarar que la orientación sexual  en sí misma, no es condición preponderante en la adquisición del VIH; sino más bien, como dijimos, la falta de precaución  ante una epidemia que no hace distinciones .Por eso, insistimos en la inoperancia y el estigma que trae hablar de personas de riesgo, más que señalar “Conductas de riesgo”, éstas actitudes son las que siguen aquellos seres humanos que no respetan las orientaciones necesarias para evitar la dolencia., y lograr así que el virus continué extendiéndose .

 

Dificultades

 

 

1 -El Empleo:

A. Si tiene VIH, es una persona que podría no ser suficientemente productiva, por consiguiente, no justificar su fuerza laboral debido a la enfermedad.

B Genera desconfianza entre sus empleados o compañeros de trabajo por la ignorancia del tema del VIH, la gente se asusta al ver una persona que tiene VIH todavía en pleno siglo XXI C. Una persona con incapacidad laboral debe por ley recibir un pago por su tiempo de incapacidad, a un empresario, esto jamás le convendría en materia de productividad.

 

2-El aspecto social:

A. Las personas positivas públicamente suelen ser objetos de críticas, y comentarios bastante ofensivos, y son considerados como personas poco atractivas para conocer, ya que son portadores de una enfermedad que aún es considerada mortal, tratable pero sin cura aun.

B. La sexualidad es uno de los factores sociales por los cuales nosotros aprendemos a conocer a las personas, por eso mismo cuando una persona es diagnosticada como positiva, muchas veces es considerada promiscua ,por lo que muchos individuos evitan tenerla cerca.  

 3. El aspecto Cultural:

A. Si tiene una enfermedad contagiosa, debe ser apartado de la sociedad, ya que puede pasar la enfermedad a otra persona.

B. La educación que tenemos en nuestras sociedades sobre el tema es poca o nula, por lo tanto se suele temer a la “enfermedad” y en su defecto a aquel ,que tiene la enfermedad.



 

 

Se dice que….

 

El sida hizo su aparición en 1981, cuando en las ciudades de Nueva York, Los Ángeles y San Francisco, Estados Unidos, se detectaron grupos de hombres homosexuales que presentaban infecciones y / o tumores malignos inusuales para su edad.(la falsa y triste creencia de la peste rosa) .

Dos años más tarde, en 1983, se descubrió que la enfermedad era causada por un virus (denominado VIH) y en 1985 comenzaron a aplicarse pruebas diagnósticas de la infección mediante estudios en sangre (pruebas serológicas), que permiten detectar cuando una persona ha estado en contacto con el virus.

En la actualidad, hay sida en todos los continentes y prácticamente en todos los países del mundo, según el reporte realizado por la Organización Mundial de la Salud y las Naciones Unidas, destacando que los diez países con el porcentaje más alto de adultos infectados de VIH se encuentran todos en el continente africano. El África subsahariana, donde había 25,8 [24-28,7] millones de personas infectadas por el VIH en 2014, es la región más castigada. Casi el 70% del total mundial de nuevas infecciones por VIH se registra en esta región conforme lo establece el informe de la mencionada Organización .El mismo Programa Conjunto de Naciones Unidas sobre VIH/Sida destaca que Panamá registra la más alta prevalencia en países de América Latina con este virus y que la tendencia es en alza.

 

La peor epidemia…

 

En el mundo actual, el azote de sida ha sido acompañada por otra epidemia más terrible aún: el miedo, la estigmatización y discriminación hacia quienes han contraído el virus Mientras esta situación continúe, la idea de que los infectados forman parte de grupos “especiales” no dejará de existir, y su exclusión social tampoco.

Debemos combatir estos conceptos erróneos mediante una educación académica certera y de calidad que  debe ir mucho  más allá de una simple publicidad televisiva, teniendo en cuenta las características de cada tipo de público, con lenguajes y códigos particulares. Además, se requieren campañas en escuelas y trabajos personalizados. No se trata de desparramar el temor, sino de enseñar a protegerse  del virus, a la vez, que respetar y fomentar la participación de quienes han adquirido el VIH en actividades sociales. Ya es hora de que el personal sanitario, los afectados y la sociedad en general se exprese respecto al VIH con los términos que le corresponden y no con otros que alteren su verdadera naturaleza. 

Una vez más trabajar juntos es la única forma de lograr una verdadera sociedad inclusiva, no hay otro camino posible. Y solo hay un mecanismo: La Educación. Desterremos los temores infundados y colaboremos como corresponde en la erradicación definitiva de esta dolencia, y muy especialmente de los prejuicios y la discriminación por tal motivo, que tanto mal hacen a los seres humanos.

“Debemos encontrar una manera de vivir juntos, en paz, en armonía y pleno respeto de los derechos humanas y las libertades fundamentales”,Ban Ki-moon.

Datos valiosos:

http://www.who.int/features/qa/71/es/

http://www.inmigrantesenpanama.com/2015/05/24/panama-el-pais-con-mas-incidencia-de-vihsida-en-america-latina/

http://www.cat-barcelona.com/faqs/view/diferencia-entre-ser-portador-del-v-i-h-y-estar-enfermo-de-sida

https://m.nichd.nih.gov/topics/hiv/espanol/informacion/Pages/riesgo.aspx http://www.who.int/features/qa/71/es/

 


* Sheina Leoni Handel:
Es profesora de sociología y Derecho en Educación Secundaria y UTU. Escritora  y activista de los DDHH. Fundadora de "Águilas Multicolores".

 

 

 

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