Un
momento difícil…
Hacía un largo rato que Mauricio se
encontraba sentado en una confitería cercana a su barrio tratando de beber
el café ya casi frío que tenía sobre la mesa.
Su rostro reflejaba una preocupación fácil de detectar; había recibido el
resultado de la prueba de VIH hacía unas
horas y el médico le había confirmado lo que ya sospechaba: era portador del
virus. Miró otra vez el reloj del lugar; Pablo, su mejor amigo, había quedado
en venir a conversar con él a las diecisiete horas, y ya se había atrasado una
hora. Raro, el joven era muy puntual. Mientras seguía aguardando, vino a su mente la última
conversación telefónica con el muchacho, en la cual angustiado, le había
confiado el amargo secreto guardado
hasta el momento.
“No sabías que eras gay”-había tartamudeado Pablo.
“No lo soy”,
te lo hubiese dicho si así fuese-respondió rápidamente el aludido.
El diálogo había concluido, con la
promesa de continuar charlando personalmente.
Mauricio pensó que Pablo se había arrepentido,
y abonando la cuenta, caminó pesadamente hasta la puerta de su hogar, para
hablar con su madre, deteniéndose en el primer escalón dela casa tratando de
obtener el valor que le faltaba. En ese instante, una voz conocida gritó su
nombre: -Mauricio-Se me hizo tarde y olvidé el celular, pero acá estoy, como
siempre-dice su amigo Pablo agitado por la carrera.
Los dos hombres se abrazaron con
fuerza, continuando juntos el trayecto hasta la puerta de la vivienda .Un
último apretón de manos por parte de Pablo, y Mauricio abrió ésta
abre con resolución. Su madre lo esperaba preocupada en el sillón del
comedor, pero el joven ya no tenía miedo, la soledad y el miedo lo habían
dejado tranquilo.
Tenga empatía, póngase en el lugar del otro.
Este artículo no pretende ser una
clase de biología que trate sobre las características del VIH, o del sida, de las cuales conozco muy poco, ni
tampoco pasar a formar parte de la Inquisición,
tratando de determinar quiénes culpable o no del surgimiento de una epidemia
que está entre nosotros, y por el momento, ha decidido quedarse.
La idea es simplemente plantear el
daño que podemos causar a las personas que padecen VIH por los terribles
prejuicios y la discriminación de que muchas veces son objeto, a la vez que
poner un grano de arena, en la concientización de la responsabilidad que
debemos adquirir para prevenir y controlar
el avance de esta afección. Eso
es lo que intentaremos realizar con este humilde aporte.
Aunque usted no lo crea…
¿Qué pensaría si le digo el VIH no se contagia? Pues que estoy diciendo
disparates. Efectivamente, este virus no se CONTAGIA se TRANSMITE; parece tenue
la diferencia, pero no lo es. Cuando una persona se contagia de una enfermedad,
lo hace sin poder evitarlo. Por citar un ejemplo muy sencillo, mencionaremos la
gripe. Subimos a un ómnibus, entramos a
una clase, o, y puede ser que si alguna de las personas tiene gripe ésta
ingrese a nuestro organismo muchas
veces, sin poder evitarlo.
La gripe, es contagiosa. El VIH, a
diferencia del ejemplo antes citado, no puede viajar por el aire e ingresar a
un organismo humano, debe ser arrastrado hacia el interior del mismo, a través
de un intercambio de fluidos entre dos personas. Es necesario conocer cuáles de
éstos pueden transmitir este virus y cuáles no. Por ejemplo: la saliva, sudor,
orina o lágrimas no transmiten la infección pero sí lo hacen en cambio: los
fluidos sexuales, la sangre y la leche materna .Recordemos que la exposición
del feto o el bebé al virus, antes del nacimiento, durante el parto o a través
del amamantamiento de una madre VIH positivo, pone en peligro al futuro niño.
Es correcto mencionar también que
ser portador del virus o ser
seropositivo significa que se puede transmitir la enfermedad, pero que todavía
no se ha desarrollado en la persona
(puede tardar varios años y hasta entonces no presentar ningún síntoma
de la misma). Ser enfermo de SIDA significa que ya se ha desarrollado la enfermedad. Reiteramos, en
ambos casos, podemos transmitir la enfermedad si no se toman las precauciones
debidas.
Pensar que este virus es contagioso,
puede aumentar las actitudes discriminativas, incluso dudar en querer compartir
un espacio con una persona portadora del virus, por temor a un contagio que en
realidad es imposible. Lamentablemente,
se sigue hablando de contagio, lo que genera en las personas, información
confusa, terminología errónea y fantasías atemorizantes.
Por el contrario ,comprender esta idea
,nos permite discernir fácilmente que,
por compartir un ámbito de trabajo con una persona que es portadora ,no nos
hace correr ningún riesgo, ya que no existe intercambios de fluidos
transmisores, tampoco por tomar mate café o té, y , mucho menos estar en la
misma clase escolar.
Una vez más,
recordemos:
LA SALIVA NO ES TRANSMISORA DE
VIH.
LA ORINA NO ES TRANSMISORA DE
VIH.
LAS LÁGRIMAS Y EL SUDOR NO SON
TRANSMISORES DE VIH.
Y FUNDAMENTAL: NO PUEDO CONTAGIARME de
algo que no es CONTAGIOSO.
¿Quiénes pueden enfermarse de sida?
Todas las personas que no siguen las
indicaciones necesarias por los especialistas en el tema así de simple. Este
virus no es exclusivo de personas con una determinada orientación sexual
(homosexuales, trans ), si bien esta falsa implicación se originó en el hecho
de que los primeros casos documentados en Estados Unidos, afectaron a hombres
que mantenían relaciones sexuales con
individuos de su mismo sexo. Pero no hay que descartar la investigación que
realizó el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA)
revelando en el informe “The Gap Report”
(El Informe de la Brecha) que los hombres homosexuales y las mujeres
transgénero son mucho más afectados por la epidemia del VIH/SIDA, que el resto
de personas adultas en el mundo.
Según el informe del departamento de
las Naciones Unidas, “los hombres gay y
otros hombres que tienen sexo con hombres son 19 veces más propensos a vivir
con VIH que la población general”. Además, “las mujeres transgénero son 49 veces más propensas a vivir con VIH que
otros adultos en edad reproductiva”.
The Gap Report advirtió también que la incidencia, es decir
nuevos casos de infección de VIH, “entre
hombres gay y otros hombres que tienen sexo con hombres está creciendo en
varias partes del mundo”.
Cabe aclarar que la orientación
sexual en sí misma, no es condición
preponderante en la adquisición del VIH; sino más bien, como dijimos, la falta
de precaución ante una epidemia que no
hace distinciones .Por eso, insistimos en la inoperancia y el estigma que trae
hablar de personas de riesgo, más que señalar “Conductas de riesgo”, éstas
actitudes son las que siguen aquellos seres humanos que no respetan las
orientaciones necesarias para evitar la dolencia., y lograr así que el virus
continué extendiéndose .
Dificultades
1 -El Empleo:
A. Si tiene VIH, es una persona que
podría no ser suficientemente productiva, por consiguiente, no justificar su
fuerza laboral debido a la enfermedad.
B Genera desconfianza entre sus
empleados o compañeros de trabajo por la ignorancia del tema del VIH, la gente
se asusta al ver una persona que tiene VIH todavía en pleno siglo XXI C. Una
persona con incapacidad laboral debe por ley recibir un pago por su tiempo de
incapacidad, a un empresario, esto jamás le convendría en materia de
productividad.
2-El aspecto social:
A. Las personas positivas públicamente
suelen ser objetos de críticas, y comentarios bastante ofensivos, y son
considerados como personas poco atractivas para conocer, ya que son portadores
de una enfermedad que aún es considerada mortal, tratable pero sin cura aun.
B. La sexualidad es uno de los
factores sociales por los cuales nosotros aprendemos a conocer a las personas,
por eso mismo cuando una persona es diagnosticada como positiva, muchas veces
es considerada promiscua ,por lo que muchos individuos evitan tenerla cerca.
3. El
aspecto Cultural:
A. Si tiene una enfermedad contagiosa,
debe ser apartado de la sociedad, ya que puede pasar la enfermedad a otra
persona.
B. La educación que tenemos en
nuestras sociedades sobre el tema es poca o nula, por lo tanto se suele temer a
la “enfermedad” y en su defecto a aquel ,que tiene la enfermedad.
Se dice que….
El sida hizo su aparición en 1981,
cuando en las ciudades de Nueva York, Los Ángeles y San Francisco, Estados
Unidos, se detectaron grupos de hombres homosexuales que presentaban
infecciones y / o tumores malignos inusuales para su edad.(la falsa y triste creencia
de la peste rosa) .
Dos años más tarde, en 1983, se
descubrió que la enfermedad era causada por un virus (denominado VIH) y en 1985
comenzaron a aplicarse pruebas diagnósticas de la infección mediante estudios
en sangre (pruebas serológicas), que permiten detectar cuando una persona ha estado
en contacto con el virus.
En la actualidad, hay sida en todos
los continentes y prácticamente en todos los países del mundo, según el reporte
realizado por la Organización Mundial de la Salud y las Naciones Unidas,
destacando que los diez países con el porcentaje más alto de adultos infectados
de VIH se encuentran todos en el continente africano. El África subsahariana,
donde había 25,8 [24-28,7] millones de personas infectadas por el VIH en 2014,
es la región más castigada. Casi el 70% del total mundial de nuevas infecciones
por VIH se registra en esta región conforme lo establece el informe de la
mencionada Organización .El mismo Programa Conjunto de Naciones Unidas sobre
VIH/Sida destaca que Panamá registra la más alta prevalencia en países de
América Latina con este virus y que la tendencia es en alza.
La peor epidemia…
En el mundo actual, el azote de sida
ha sido acompañada por otra epidemia más terrible aún: el miedo, la
estigmatización y discriminación hacia quienes han contraído el virus Mientras
esta situación continúe, la idea de que los infectados forman parte de grupos
“especiales” no dejará de existir, y su exclusión social tampoco.
Debemos combatir estos conceptos
erróneos mediante una educación académica certera y de calidad que debe ir mucho
más allá de una simple publicidad televisiva, teniendo en cuenta las
características de cada tipo de público, con lenguajes y códigos particulares.
Además, se requieren campañas en escuelas y trabajos personalizados. No se
trata de desparramar el temor, sino de enseñar a protegerse del virus, a la vez, que respetar y fomentar
la participación de quienes han adquirido el VIH en actividades sociales. Ya es
hora de que el personal sanitario, los afectados y la sociedad en general se
exprese respecto al VIH con los términos que le corresponden y no con otros que
alteren su verdadera naturaleza.
Una vez más trabajar juntos es la
única forma de lograr una verdadera sociedad inclusiva, no hay otro camino
posible. Y solo hay un mecanismo: La Educación. Desterremos los temores
infundados y colaboremos como corresponde en la erradicación definitiva de esta
dolencia, y muy especialmente de los prejuicios y la discriminación por tal
motivo, que tanto mal hacen a los seres humanos.
“Debemos encontrar una manera de vivir juntos,
en paz, en armonía y pleno respeto de los derechos humanas y las libertades
fundamentales”,Ban Ki-moon.
Datos valiosos:
http://www.who.int/features/qa/71/es/
http://www.inmigrantesenpanama.com/2015/05/24/panama-el-pais-con-mas-incidencia-de-vihsida-en-america-latina/
http://www.cat-barcelona.com/faqs/view/diferencia-entre-ser-portador-del-v-i-h-y-estar-enfermo-de-sida
https://m.nichd.nih.gov/topics/hiv/espanol/informacion/Pages/riesgo.aspx http://www.who.int/features/qa/71/es/
* Sheina Leoni Handel: Es profesora de sociología y Derecho en
Educación Secundaria y UTU. Escritora y
activista de los DDHH. Fundadora de "Águilas Multicolores".