Cuando las leyes no son
suficientes
“El verdadero problema del transexual, hoy, no es que esté
atrapado en un cuerpo equivocado. El verdadero problema del transexual, hoy, es
que está atrapado en una mentalidad social equivocada”.
Yliana Sánchez Directora de la revista BSTC
Asombro.
El joven demostraba, en los últimos tiempos una conducta extraña. Siempre había
sido considerado “raro “por sus padres, pero atribuían este comportamiento a su
carácter profundamente reservado, amaba muchísimo leer y pasar largas horas
reflexionando en soledad. No se le conocían amigos y había manifestado en
varias oportunidades la idea de dejar de estudiar porque los compañeros no lo
comprendían.
Finalmente, a pedido de sus progenitores decide ir dos días a un campamento
liceal que la Institución educativa a la que pertenecía había decidido realizar
con el fin de fomentar la socialización entre los pares.
En la ausencia del muchacho, y desoyendo las protestas del esposo, la madre
decide ordenar el cuarto de éste (quizá, guiada por la llamada intuición
maternal que le permitiría descubrir algún indicio de ese extraño ser en el que
se había ido convirtiendo su hijo) Y ahí, en el fondo de un cajón del ropero,
comienza a descubrir distintas prendas femeninas: camisones, zapatos y una
colección de fotos del joven utilizando las mismas , impidiéndole a la madre
inventar cualquier excusa para negar que esos objetos pertenecían al mismo.
La mirada angustiada de la mujer se pierde a través de la ventana ¿.Qué debo
hacer? ¿Quién es esa extraña niña que se está tratando de robar a su querido
hijo?
Un minuto de perplejidad e indecisión la invade. De pronto, guarda todo en el
lugar correspondiente, y secándose las lágrimas que rodaron traviesamente por
el rostro, va a reunirse en el living con su marido, para ver el documental que
tanto les gusta…
Seguramente, cuando el joven vuelva del campamento aclarará la situación…con
certeza, se trata de un tonto juego…
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Escena de la película "Mi vida en rosa". |
Un tema
difícil
No siempre es fácil hablar de transexualidad, quizá, porque es un término que
no lo comprendemos cabalmente, o tal vez por algún extraño tabú que varias
personas comparten, haciendo creer en el colectivo imaginario que si lo
mencionan demasiadas veces, sus seres queridos podrían adquirir esa temible
“dolencia”
Nada más utópico que esta posibilidad: es imposible que contagie, porque no es
una enfermedad, aunque todavía muchas personas o instituciones la ven como una
afección que puede curarse con la terapia adecuada. Tampoco es una moda, que
tiene un comienzo y un fin, en cuanto aparece otra que la suplanta.
Por el contrario, nombrar y compartir conceptos racionales sobre aspectos
muchas veces incomprendidos o rechazados por la sociedad, nos ubica un paso más
adelante hacia la erradicación de un estigma que hace sufrir lastimosamente a
tantas personas.
Y como dijo hace tanto tiempo ya el Príncipe Hamlet,”Ser o no ser, esa es la cuestión” No hay otra posibilidad, ni
nada de que avergonzarnos, aprendamos a vivir dignamente como somos y exijamos
a la sociedad que así nos respete.
Nadie tiene porque vivir escondido, salvo aquellos seres que no saben aceptar a
quienes son diferentes a ellos. Esas personas, sin duda, son las que
verdaderamente están enfermas.
Entonces…
La Real Academia Española se refiere a transexual como aquella persona que “que se siente del otro sexo y adopta sus
atuendos y comportamientos” o “que
mediante de un tratamiento hormonal e intervención quirúrgica adquiere los
caracteres sexuales del sexo opuesto“
Científicamente, se cree que el término transexualidad fue citado por
primera vez por Harry Benjamín (12
de enero de 1885 – 24 de agosto de 1986) en 1953, quién retomó la definición
ofrecida antes por David Cauldwell
(1857-1959):
“La
transexualidad es el deseo irreversible de pertenecer al sexo contrario al
genéticamente establecido (o sea, al de nacimiento, ratificado por sus
genitales) y asumir el correspondiente rol (el contrario del esperado)
recurriendo si es necesario a un tratamiento hormonal y quirúrgico encaminado a
corregir esta discordancia entre la mente y el cuerpo.”
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David Cauldwell (1857-1959). |
Seguramente hay muchos lectores para quienes estas ideas ameritan más claridad,
y como no todos comprendemos los diferentes términos científicos, insistiremos
en algo que mencionamos al comenzar, y aduce a lo que no es la transexualidad:
No es una enfermedad, más allá de que, como ya dijimos al inicio de este
trabajo, todavía dicha realidad no se haya aclarado con exactitud en todos los
ámbitos en que debería hacerse.
Un poco de historia
El fenómeno de la transexualidad no es algo nuevo,
ha estado presente en todas las culturas a lo largo del tiempo.
Existen infinidad de documentos o relatos históricos, alusiones de todo tipo,
que hacen referencia y sugieren la existencia de transexuales en la historia de
la humanidad. En unas sociedades se les ha idolatrado, en otras se les ha
marginado y rechazado.
Por ejemplo, la diosa Castalia, en la mitología
griega era comprensiva y accedía “a los deseos de las almas femeninas
encerradas en cuerpos masculinos.” En la antigua Roma, existían unas personas nacidas con cuerpo de varón, que
decidían su género y auto castraban sus genitales masculinos. Eran las
sacerdotisas Gallae.
El filósofo judío Philo de Alejandría (20 a.C.-50 d.C.) describió ciudadanos
romanos varones que invertían grandes sumas de dinero para cambiar su
naturaleza masculina en femenina.
Ovidio, poeta de la antigua Roma, contempla todos los cambios de cuerpo
posibles en su poema “Las Metamorfosis” sugiriendo de forma bastante clara el
deseo de algunas personas de su época de cambiar de sexo.
El emperador romano Heliogábalo (218-222
d. C.) afirmaba sentirse mujer. Este llegó a pedir a sus médicos que le
practicasen una cirugía para cambiarse de sexo.
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Heliogábalo. |
Y aún en la Edad Media tenemos referencias de transexualidad incluso dentro de
la misma Iglesia Católica. Por ejemplo a Santa Wilfrida, cuya leyenda dice que
pidió a Dios el poder convertirse en hombre y le fue concedido... Asimismo, San
Onofre pidió a Dios que le hiciera varón, y su cuerpo se masculinizó. Del Papa
Juan VIII (sucesor de León IV) siempre han corrido rumores de que
biológicamente había nacido mujer aunque se hizo pasar toda su vida por varón,
historia que fue censurada varias veces por la Inquisición. También podemos
mencionar casos bastante evidentes como el de Juana de Arco (1412-1431) que fue
ejecutada por la Inquisición además de por brujería, por llevar constantemente
ropas de hombre y comportarse como varón en todo momento.
En algunas épocas históricas, los transexuales pasaron a ser considerados como
desviados, o convertidos en delincuentes, y como hemos visto, hasta enfermos
mentales.
Miles de personajes de todos los tiempos y todos
los ámbitos sociales, han nacido transexuales. Entre ellos se encuentran
médicos, filósofos, abogados, telefonistas, peluqueros, mecánicos, militares,
artistas, empresarios, científicos, farmacéuticos, profesores, políticos,
fotógrafos, fontaneros, deportistas, etc.
El primer caso público de una persona transexual
sometida a un cambio de sexo fue Christine Jorgensen, militar americana,
operada con éxito en 1953. Por nombrar otro de los muchos casos conocidos
mencionaremos a Lynn Conway, reconocida científica en el mundo de la
informática, que no reveló su transexualidad hasta que estuvo segura de haber
triunfado con sus descubrimientos. Y podemos seguir investigando y nombrando a
una gran cantidad de personas transexuales, muchas de ellas viviendo encerradas
en un lastimoso closet por el temor de ser estigmatizados por la sociedad.
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Christine Jorgensen. |
2021,DC
Las personas transexuales se pueden considerar uno
de los colectivos que más sufren discriminación en el mundo. El hecho de sentir
que el sexo con el cual nacen es diferente al género con el que realmente se
identifican, puede resultar en una experiencia personal y socialmente
desbastadora. El rechazo que sufren dichos seres humanos en el ámbito social y
laboral, la falta de visibilidad, la falsa idea de que la transexualidad es un
trastorno mental; y que en cierto modo ha sido extendida por la ciencia, la
falta de leyes en algunos países que les permita tener una vida normal (leyes
respecto al cambio nombres, leyes que condenen la discriminación, etc.) ,son
algunos de los eventuales problemas que pueden sufrir ese colectivo, y que los
condenan lamentablemente a una vida de exclusión social y pobreza con pocas
posibilidades de recuperación.
Reconociendo
algunas dificultades.
1-La falta de habilidades sociales y personales,
y que a su vez, son demandadas dentro de la sociedad, y muy especialmente en el
mercado laboral; situación nacida muy especialmente por el rechazo y el estigma
que sufre este colectivo en los centros educativos, aumentando como
consecuencia su deserción en los mismos....Investigaciones realizadas en Uruguay,
señalan que más de un el 80 de las transexuales uruguayas no terminó la
enseñanza en el liceo y aproximadamente un 57% de ellas percibe ingresos
mensuales inferiores al salario básico. Esto repercute en que más del 50% de
las mujeres transexuales se dediquen a la prostitución, con todos los riesgos
que esto apareja. (Estudio publicado en 2012 por la ONG Mujer y Salud en
Uruguay (MYSU),
2-Empleos precarios e inseguros. Como
mencionamos anteriormente la falta de cualificación hace que muchas de estas
personas se dirijan a empleos precarios y temporales. La falta de formación es
uno de los temas recurrentes presente en la mayoría de las minorías sociales,
–impidiéndoles abandonar el «círculo de la precariedad».
3- Desarraigo familiar. La carencia o ruptura de vínculos familiares por
este motivo hacen que muchos transexuales sean condenadas a una vida de
ostracismo y soledad, sin referentes o contactos afectivos de protección ante
las dificultades que se le van presentando a lo largo de su vida. Por este motivo,
(y más allá de la necesidad afectiva que todas las individuos tenemos), es
necesario brindar a estas personas oportunidades reales de socialización y
aprendizaje, evitando desenlaces que podrían llegar a ser fatales.
4- Falta de autonomía personal, baja motivación.
Nadie puede vivir motivado sino se siente querido, aceptado .El afecto y la
aprobación son motores fundamentales para el progreso de cada uno,
especialmente en personas vulnerables emotivamente ,no solo por sentirse
“diferente “sino también por todos las situaciones de rechazo que le han tocado
vivir.
5-Autopercepción negativa .Este factor, hace
surgir en los transexuales una reducción de aspiraciones y proyectos vitales y
laborales, acompaña de mucha inseguridad, dificultando establecer objetivos
reales en su itinerario personal, dando mayor importancia “al día a día», o al
«e ir tirando poco a poco” y con poca proyección al futuro.
Ataquemos
el terrible flagelo de la ignorancia
Un porcentaje importante de sociedades posee en la
actualidad leyes de gran valor jurídico para proteger a los colectivos más
vulnerables de la sociedad. También existen muchísimos tratados internacionales
que tratan de favorecer o resguardar a las minorías sociales más desfavorecidas
en el mundo.
Uruguay no es la excepción, existen varias de estas manifestaciones jurídicas,
que contribuyen de una manera muy importante a la protección y el desarrollo de
la comunidad LGBT, y algunas en especial para las personas transexuales;
grandes conquistas por los cuales los colectivos han luchado incansablemente
día tras día. Sin estos logros, nada sería posible.
Sin embargo, es fundamental una concientización intensiva en todos los seres
humanos de que, estas normas tiene una razón de ser, la diversidad es la regla,
y no la excepción, conjuntamente con la certeza de que todos tenemos derechos y
deberes, y éstos, tiene que ser respetados en su totalidad.
Los seres humanos no somos cifras ni datos que leemos en investigaciones y,
momentáneamente acompañamos, para luego olvidar por otros intereses más gratos
y menos molestos.
Todos formamos parte de este planeta, poseemos sentimientos, anhelos,
objetivos, y eso es lo que nunca debemos perder de vista.
¿Cuál es nuestra etnia, sexo, orientación sexual, identidad de género?
A nadie le importa fuera de nosotros mismos, y de aquellos a quienes
consideramos pertinente decírselo. Esa es nuestra intimidad, tiene existencia
en el ámbito privado de cada uno. Mientras no logremos comprenderlo, no habrá
leyes, manifestaciones ni movimientos sociales que eviten la violencia, los
prejuicios y la discriminación.
Aprendamos a valorar a cada persona por sus cualidades personales individuales
y sus fortalezas, ayudándolos a vencer sus debilidades.
Colaboremos, para que cada individuo transcurra su existencia como quien es
realmente, sin vergüenza o miedo.
El día que esto sea logrado, estaremos verdaderamente encaminados a una
sociedad más justa y más equitativa, pudiendo exclamar definitivamente:
Diferentes, pero iguales en derechos. Como debe ser.

*Sheina Lee Leoni: Es Profesora de
Sociología y Derecho. Escritora y activista por los DDHH de la personas LGBT.
Integrante de “Águilas Multicolores”. Integrante de la Red Cultural del
Mercosur. Integrante de SELAE Internacional. Representante FATLA Uruguay
Agosto, 2015- Asociada a SAFE CREATIVE
http://www.safecreative.org/
Material
de guía:
http://www.elpais.com.uy/…/transexuales-uruguayos-exigen-ig…
https://atclibertad.wordpress.com/…/%E2%80%9Cel-verdadero-…/
http://hispanohablantes-ams-transexualidad.blogspot.com/…/d…
http://www.presidencia.gub.uy/…/personas-trans-accederan-a-…
http://www.impo.com.uy/lenguaje_c/pdf/derecho_idgenero.pdf
https://www.apa.org/topics/lgbt/brochure-personas-trans.pdf
http://www.wpath.org/uploaded…/…/files/SOC%20-%20Spanish.pdf
http://www.stp2012.info/Informacion_complementaria.pdf
http://www.comunicarigualdad.com.ar/hacia-la-despatologiza…/